domingo, 2 de noviembre de 2014

Facetiempos


Es curioso, uno puede llegar a cansarse de las cosas que él mismo hace. Me está pasando con las redes sociales. Me paso el día compartiendo opiniones, enlaces y tonterías en facebook. Estornudo y lo escribo en facebook. Y cada vez me doy cuenta del problema tan grande que resulta.

¿Cómo ha empezado y por qué se ha ido de las manos? No lo sé. Imagino que la culpa la tienen muchos factores para todos nosotros, pero los resultados son muy preocupantes. ¿No os habéis fijado? Ahora cuando la gente queda para verse y van a contarse algo el otro dice: ah, si, lo leí en tu facebook. Entonces ambos proceden a mirar sus móviles por unos minutos.

Ya no hay sorpresas. No hay secretos, o al menos, hay muchísimo menos misterio que antes. Conoces a un mozo o una moza que te gustan y rápidamente vas a cotillearle las fotos al facebook, sus comentarios y sus publicaciones como si fueras un maldito agente de la Gestapo. Es una información tan fácil y directa... tienta, pero estamos perdiendo la capacidad de conocernos unos a otros sobre el terreno y no sobre la pantalla.

Es horrible, pero las cosas han cambiado. No conozco a nadie que hoy por hoy no pase la mitad del rato que dura un café con alguien mirando su movil en lugar de hablando. ¿Para qué vas a preguntar si lo que te interesaba ya lo has leído? Es como leerse un libro después de ver el resumen del capítulo: a rasgos generales ya sabes lo que pasa. 

Me he dado cuenta cuando, al recibir hace unos días la carta de una amiga de la que no sabía nada desde hace mucho, he sentido una ilusión enorme. Estaba leyendo un papel tras otro y me golpeó, así.

Se ha perdido el encanto de las cartas. De los e-mails. Incluso del maldito messenger, que, dentro de lo que cabe, aún lleno de fechas y "te quiero cari"s no estaba tan mal. Al menos hablabas con la otra persona de forma directa. Pero todo este rollo del me gusta fácil y de la adicción que tengo, que tenemos todos a postear hasta cuando vamos a mear me está tocando mucho la moral y creo que ha llegado el momento para mí de desengancharme de este asunto.

Deseo volver a comunicarme con la gente como antes. A que haya sorpresas cuando les pregunto qué tal están. Y a ahorrarme tiempo de vida leyendo las "Diez cosas que hacen las mujeres que los hombres odian" o los "Veinte trapecistas turcochipriotas que te dejarán boquiabierto". En su momento huí de la televisión porque solo veía basura y ahora mismo creo que voy a ir haciendo lo mismo con esta mierda.

Me voy a tomar unos días para recuperar las fotos que quiero tener y para asegurarme de mantener contacto con la gente que no quiero perder de vista y voy a migrar a Skype y cerrar el maldito facebook.

Quién quiera mi Skype o mi e-mail, estaré encantada de dárselo.

Espero sinceramente que empecemos a ver la luz, no sea que cuando lleguemos a los 70 la mitad de nuestra vida social consista en cotillearle las fotos a tu amiga en vez de coger el teléfono y llamarla.

2 comentarios :

Mitocacattiva dijo...

Me encanta. Yo mantengo el facebook pa saber de ti, pero siempre prefiero encontrarte en skype o en watshapp. Un beso.

elanor_auditore dijo...

Es verdad, y no me excluyo, pero salir a la calle y verte a seis de cada diez personas mirando el movil, en la calle, en el metro, en cualquier sitio, absorvidos.
De oir a incluso familiares mios decir que este año quizas ni mandar postal de navidad porque es mas facil y barato hacerlo por wassup, a lo que yo conteste que para mi es una tradicion que me gustaria ssgukr aunque casi nadie me la devuelve, pero me gusta hacerlo al igual que las postales cuando viajo, para una vez que escribo
Es una epoca que con tantas facilidades para comunicarnos es cuando mas incomunicados
estamos.
Intento no mirar tanto el fb, es dificil, pero no imposible, pero tampoco he sido ninca de skype o messenger.
Pero si que me gustaria tu dire para mandarte postales nn si no importa...me gusta esa tradicion.