Sin Ayuda

Hoy he ido al Job Center, a la entrevista para pedir la ayuda del desempleo. Al principio parecía que todo iba bien, pero cuando la chica vio en los papeles que estaba viviendo con una pareja me dijo que no podían dármela. Le pregunté por qué, y me dijo que porque él estaba trabajando. Trabaja menos de 25 horas semanales, por lo cual aún entro dentro de los candidatos. Pero al final me dijo que no me iban a dar ningún dinero. 

Le expliqué que el dinero era lo de menos, que lo que más me interesaba era encontrar un trabajo, pedir algo de consejo sobre cómo y dónde buscar y hacer algún curso del desempleo, lo que fuera. Me dijo que no eran una bolsa de trabajo, de la forma más seca posible y que no me podían ayudar. 

Entonces, si mi novio y yo estuviéramos los dos en el paro rascándonos la entrepierna, nos darían dinero, cursos y lo que fuera. Pero si no pides vivir del cuento y lo que pides ya no es dinero, sino algo de ayuda, te despachan rápido y a lo siguiente. 

Después de casi rogarle a esa mujer por al menos unos consejitos rápidos y conseguir nada más que una tarjetita verde con una página web (bolsa de trabajo online del gobierno de UK) y una mirada de "no me des más la murga" me fui del job center con el nudo en la garganta.

Y al final, cuando iba en el autobus secándome las lagrimillas que se escapaban sin permiso, llegué a la conclusión de que no tendría que haber esperado nada. Que en esta ciudad ya había aprendido que nadie va a ayudarme, solo yo. Y que encontraré como siempre la forma de buscarme la vida como lo he hecho antes.

Si no puede ser a las buenas, será a las malas. Inventándome el currículum, mintiendo y lo que haga falta. 

Solo me queda concluir con un consejo que le doy a todos los que puedo, que se que ahora mismo están estudiando en España y algunos de ellos siguen en esa crisis del estudiante dormido que no sabe que rumbo tomar ni cómo terminar sus estudios por falta de motivación: estudiad. Estudiad inglés, haced cursos, sacaos el título, preparaos todo lo posible. Porque todo es poco y cuando todo lo que os quede sea mirar hacia delante y buscaros la vida, sin experiencia laboral, sin un título y sin dinero, de nada van a serviros las crisis estudiantiles y existenciales. 

Que a nadie ahí fuera le importa una mierda. Vivís en un país en el que estáis perdiendo todos los derechos y beneficios de ser españoles y si salís fuera, iréis a países donde la mayoría de derechos no serán para vosotros. 

Por desgracia, ninguno de ellos me hará caso, pero casi todos entenderán lo que quiero decir cuando llegue el momento. 

Os deseo a todos algo más que suerte.