martes, 25 de septiembre de 2012

Laura 2 - Londres 1




Hoy estaba yo limpiando mis aulas de la madrugada como de costumbre, cuando de repente, me veo venir en plan juzgado penal al mánager de mi empresa, mi supervisora de la media mañana y mi supervisor de la madrugada. 

Supuse que venían a hacerme su propuesta. No sabía en realidad que lo que me iba a encontrar era con una especie de putadilla encubierta de ascenso. Pretendían ponerme a limpiar de 5 a 7 y luego de 11 a 15 en el sitio de la media mañana. Es decir, hacerme ir más lejos, más temprano, volverme y volver a ir otra vez. Les dejé hablar, explicarme su propuesta, les pregunté los detalles, me interesé. Ya se estaban frotando las manos cuando yo me debatía internamenta sobre si debía o no debía decirles lo que me había dicho mi otro supervisor el día anterior. Una vocecita interna me dijo: Laura, tu madre siempre te ha dicho que tienes que aprender a callarte la boca en según que situaciones, ¿verdad? Bueno, pues no es ésta. Y no lo hice.

-I think I'll be clear with you.

Con esta frase me gané su atención. Y les dije que me habían hecho una propuesta mejor, señalé a mi supervisor y les dije:

-Me han ofrecido su puesto, y es mejor que lo que ustedes me están proponiendo. Siento si mi franqueza les molesta, pero yo tengo que mirar por lo mejor para mí.

Casi pude ver en sus caras de asombro, el "cling!" del punto anotado subiendo en mi marcador. Después de la cara de sorpresa, se miraron, se sonrieron y empezaron a reírse. Yo creía que se iban a enfadar o vete a saber qué.

-That's a smart thinking.

Recibí un cumplido y una mirada con asentimiento de "menuda tía, con dos ovarios" por parte de mi supervisora, y una de aprobación por parte del mánager. Me dijo que le gustaba la gente como yo, y le dijeron al supervisor que la semana que viene empezara a entrenarme para cuando el se vaya el día 6.

Así que a partir de ahora empezaré a currar como supervisora de lunes a viernes de 6 de la mañana a 6 de la tarde. Un porrón de horas, pero mejor pagadas que las de ahora y prácticamente sin hacer nada más que controlar a los trabajadores, ver que hacen bien su trabajo y charlar con mi ex-supervisor que es muy majo y ahora va a estar en la recepción del edificio trabajando. Supongo que me compraré un e-book para matar las horas.

Y a final de mes, 1200 libras para mi y unas 400 para el estado. No está mal para ser la tercera semana en la city, ¿eh?

Y es que Londres, después de este fin de semana me lo debías. Ahora estamos en paz.


1 comentario :

Punkita dijo...

JOé joé joé!! Vaya tia bien puesta. Me alegro un montón Lau :) Que dificil le estás poniendo a la vida que te devuelva mis brazos jajaja. Voy a tener que ir a buscarte ¬¬ GUAPA!